EL LAZARETO DEL MUELLE DE LA BENEDICTA EN LOS AÑOS 80 DEL SIGLO XIX

Fotografía del remolcador "Auxiliar" en la que se observa a esta embarcación navegando junto al lazareto del Muelle de la Benedicta. 

El paseo cotidiano por nuestro entorno más cercano nos hace descubrir restos de edificaciones que se levantaban siglos atrás y que todavía en la actualidad, algunos restos de estas todavía perduran, curiosamente solo observables en determinados momentos del día.

Uno de estos escasos restos y que como comento solo es posible su visionado en determinados momentos de la jornada diaria, se encuentra en el paseo del actual Muelle de la Benedicta.

 

En este lugar, y solo cuando la bajamar así lo permite, se pueden apreciar la base de una edificación sanitaria construida en piedra en el pasado siglo XIX en este muelle.

 

Estos restos corresponden a un antiguo hospital que se levantaba en este lugar, construcción promovida por mineros y armadores que llegaron a ofrecerse a adelantar diversas cantidades de dinero para levantar, lo que se conoció en su momento, como un Lazareto de Observación de Puerto de Bilbao.

 

Plano de 1889 en el que se identifica a este centro médico en esas fechas.

Los primeros proyectos para levantar este centro médico datan de 1882 teniendo conocimiento que en 1886 ya existía, trasladándose al mismo a aquellos marinos que presentaban síntomas de enfermedades para su estudio, valoración y paso de cuarentena si fuera necesario, tratándose a estos de las posibles patologías que pudieran padecer.

Hay que indicar que a lo largo de la ría existían varias construcciones similares de las mismas características. En 1819 la Junta Superior de Sanidad de Vizcaya decide la creación de un lazareto provisional en el astillero de Zorroza para poder evitar en lo posible, la transmisión por vía marítima, de la epidemia de fiebre amarilla.

 

Estos centros contaban con lanchas con las que los inspectores médicos realizaban reconocimientos en los barcos amarrados a lo largo de la ría, así como personal armado con fusiles como medida disuasoria y de respeto ante las personas, que de manera no voluntaria, tenían que ser ingresados en estos lugares sanitarios.

Imagen de los restos del antiguo lazareto que se pueden observar durante una bajamar.

En 1886 y a consecuencia de la posible introducción de una modificación en el Servicio Sanitario Marítimo, la prensa del momento indica en una crónica referente a este particular: “Tenemos la pretensión de poder asegurar que el planteamiento de la reforma proyectada por el director general de sanidad será bien recibida por nuestros armadores y comerciantes y, que la navegación interior del puerto obtendrá grandes ventajas, puesto que no se verá obligada a permanecer en el muelle de la Benedicta en espera de la visita, toda vez que, esta le será hecha en el fondeadero, a donde podrá dirigirse desde luego aprovechando todas las circunstancias que le sean favorables”.

A parte de las noticias que se han podido recoger sobre esta construcción, existen diversos documentos gráficos en los que se puede observar este centro médico. Uno de los más representativos puede ser un plano realizado en diciembre de 1889 por Francisco de Berriozabal y Casto de Zabala en el que se observa esta construcción claramente identificada.

Vista de los restos del antiguo lazareto del Muelle de la benedicta desde la parte superior de este.

Otro de los documentos es la instantánea tomada al remolcador Auxiliar en los años 80 del pasado siglo XIX en la que se observa el paso de este barco por el citado lazareto del Muelle de la Benedicta.

Las otras dos imágenes que acompañan a este texto han sido realizadas hace pocos días por el autor de este texto.

Una curiosa construcción que no ha perdurado pero que sus restos nos dan testimonio de su existencia.

 

A.P.T.