De los documentos que han perdurado hasta nuestros días,
resulta, al menos curioso, observar lo que realizaban en el pasado los
regidores de Portugalete concerniente a dinero de los impuestos de los habitantes
de la villa que no se gastaba y que quedaba de remanente de caja.
Durante el siglo XVIII los regidores locales invertían
diversas cantidades de dinero público como medio de obtener cierta liquidez y así obtener
unos réditos con los que poder sufragar proyectos o contingencias de la localidad.
En 1782 un representante de la villa adquiere varias
acciones de 2.000 reales vellón cada una de ellas, del Banco Nacional de S.
Carlos.
En una primera adquisición se compran las acciones que van
desde el número 18.092 a 18.099, apareciendo una segunda compra que va de la
acción número 128.822 a 128.847.
Como comprador en nombre de la villa de Portugalete aparece
Joseph de Arrospide, como no podía ser de otra manera, un importante hombre de
mar de su época de nuestra localidad.
Joseph de Arrospide fue con el tiempo un capitán de barco
con grandes intereses en el mundo naval, tanto local como de la zona y que en
varias ocasiones ha aparecido citado en este blog.
Junto a estas líneas acerco dos de los documentos adquiridos
por los representantes de la villa en el siglo XVIII, unas curiosas imágenes
impresas con el particular estilo de la época.
A.P.T.