La actividad musical en
Portugalete es una constante desde hace siglos. Hoy mismo un gran número de
masas corales han participado en un macro recital en nuestra villa, desfilando
por las calles portugalujas acompañadas al final del recorrido por la concejala
de cultura, miembro en el pasado de una de estas formaciones y que todavía es
recordada por sus antiguos compañeros.
Con toda seguridad, la persona
que más ha trabajado dentro de este apartado cultural ha sido Pedro Heredia, un
portugalujo que durante décadas se dedicó a recopilar las canciones
tradicionales de la villa, canciones que se cantaban en festividades, bares y
actividades de todo tipo y que dan una muestra de las actividades sociales que
desarrollaban los habitantes de la Portugalete en el pasado.
En el siglo XIX diferentes
autores relacionados con la cultura de la villa llegan a editar piezas
musicales en las que dan a conocer su trabajo.
Hoy acerco al blog la partitura
de una de esas composiciones, un trabajo realizado a medias por los portugalujos
Pedro Lizarraga y Julián Salazar, un
Zortziko que lleva por nombre
“Portugalete”.
El trabajo, tal como se puede
apreciar en su portada, está dedicado a “los amigos en el Churrasco del 16 de agosto de 1892” lo que da muestra de
la fecha aproximada en la que se idea esta pieza musical.
La música de este trabajo es
fruto del ingenio de Pedro Lizarraga, organista local, músico y director de la
Unión Musical de Portugalete mientras la letra corresponde a Julián de Salazar,
marino, escritor y cargo público del ayuntamiento de Donostia con los años.
La letra ensalza la villa,
haciendo un recorrido por su iglesia, el muelle o las hijas de Portugalete, el
puerto, citándolo como entre los mejores de la nación, etc.
Destacar también la portada de
este trabajo, una imagen que recoge el recién inaugurado Puente Vizcaya, obra
de arquitectura que desde su construcción ha sido una de las figuras más
emblemáticas de nuestro entorno.
Sería de interés que la Banda
Municipal en uno de los conciertos que organiza mensualmente, dedicara uno de
ellos a acercar melodías y partituras representativas de la historia musical
portugaluja, un concierto que posiblemente sería muy bien recibido por las
personas que domingo tras domingo se acercan al quiosco a escuchar a esta institución musical portugaluja.
Y también sería de interés que
los responsables locales del tema cultural trataran con más respeto a esta
formación y al público que escucha sus conciertos. En muy poco tiempo se ha
podido contemplar la rotura de una silla y la posterior caída del padre de uno
de los músicos, por cierto funcionario municipal, en una de las actuaciones a
consecuencia de las polillas que sufren las sillas de madera que se colocan en
los conciertos, o los manchones que sufrieron TODOS los espectadores que
utilizaron estas mismas sillas hace unas semanas debido a su antigüedad y falta
de higiene.
A lo mejor la próxima caída puede
sufrirla una persona edad y las consecuencias puedan ser irreparables.
Para ilustrar estas líneas
inserto la portada y las páginas interiores de este Zortziko, un trabajo que no
ha sido reproducido hasta la fecha en las publicaciones locales dedicadas a
estos temas.
Espero que la entrada guste y
hasta la próxima.
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